Después de una serie de retrasos relacionados con la congestión en la cadena de bloques de Ethereum, los tokens no fungibles de Aavegotchi llegaron al mercado abierto, donde no se quedaron ni un minuto completo, informó el equipo a Cointelegraph.
El proyecto Aavegotchi intenta crear coleccionables digitales con valor real que los respalde a través de una integración con Aave y sus aTokens, representaciones con intereses de fondos suministrados al protocolo de finanzas descentralizadas. Si bien los Aavegotchis están diseñados para incorporar algunos elementos de juego y colección, inspirados en los dispositivos portátiles Tamagotchi populares a fines de la década de 1990 y principios de la de 2000, también son un experimento de vincular los coleccionables digitales a un valor real. Los aTokens bloqueados dentro de la NFT no se pueden minar sin destruir el propio Aavegotchi, ya que representan su “fuerza espiritual”.
La garantía aToken representa un límite inferior, o valor intrínseco, del objeto de colección. Más allá de eso, cada Aavegotchi tiene diferentes rasgos de carácter, wearables y rareza general, lo que debería generar valor en el mercado de coleccionables.
La venta, o “refugio”, de los 10,000 portales iniciales se produjo el martes. Los portales se pueden usar para “convocar” a Aavegotchis, generando 10 criaturas diferentes de las cuales solo una cobrará vida, dependiendo de la elección del tenedor. Los portales se vendieron a un precio mínimo de 100 GHST, el token del proyecto que se puede utilizar para la gobernanza o la compra de accesorios para los Aavegotchis. El token se cotizaba por alrededor de USD 1,70 durante la venta, lo que significa que el proyecto recaudó entre USD 1,7 millones y USD 2 millones, dependiendo de cuántas personas compraron más de un portal y pagaron un “impuesto” adicional.
La comunidad quedó algo decepcionada con la venta, ya que muchos compradores potenciales no lograron concretarla. La razón probable es que establecieron una tarifa de gasolina demasiado baja, y los competidores más rápidos y mejor financiados pudieron arrebatar la mayoría de los NFT.
Coder Dan, CEO anónimo de Aavegotchi, le dijo a Cointelegraph que este era un resultado esperado:
“Sabíamos que ingresar 10,000 portales no sería suficiente para satisfacer la demanda. Sin embargo, queríamos permanecer fieles a nuestro número de 10,000 que se describió originalmente en el documento técnico. Afortunadamente, las diferencias entre los Haunts son menores, y siempre hemos tenido la intención de aumentar el suministro de Aavegotchis a través de los votos de AavegotchiDAO”.
“Actualmente no hay evidencia de que las ballenas se desempeñen mejor que los usuarios normales”, agregó Jesse Johnson, cofundador de Aavegotchi. “Era solo un ascensor donde algunos entraron y otros no, ¡incluidos los fundadores!”
Es posible que la comunidad pueda votar sobre más lugares que crearían más Aavegotchis. Mientras tanto, los portales existentes se pueden comprar en los mercados NFT y canjear por el coleccionable digital.
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