Agustín Carstens, gerente general del Banco de Pagos Internacionales, solicitó aún más regulaciones para las criptomoendas, afirmando que las monedas virtuales son una herramienta para eludir las leyes financieras.
En una entrevista concedida a la CNBC el miércoles, el CEO del BPI identificó el lavado de dinero y la financiación del terrorismo como áreas que requieren una regulación más sólida de las criptomonedas.
Los comentarios de Carstens, un tema común entre los críticos de las criptomonedas, se producen a pesar de la preponderancia de hechos establecidos que indican que la cripto criminalidad ocupa una pequeña proporción del comercio mundial de criptomonedas.
Según Carstens, las criptomonedas tienen notoriedad por ser instrumentos de actividades delictivas debido a la naturaleza seudónima de las transacciones de moneda virtual.
Sin embargo, las compañías de inteligencia blockchain continúan trabajando con reguladores y agencias de aplicación de la ley para brindar capacidades robustas de cripto forense. De hecho, la naturaleza rastreable de las transacciones de Bitcoin (BTC) permitió a las fuerzas del orden de los EE. UU. localizar y cerrar una red mundial de pornografía infantil en octubre de 2019.
Los vendedores de narcóticos de Darknet que adoptan pagos con criptomonedas son detenidos y juzgados de forma rutinaria en muchos países del mundo.
Aparte de adoptar frases trilladas anti criptomonedas, el director general del BIS argumentó que las criptomonedas no son una amenaza para la estructura financiera mundial. Mientras tanto, en diciembre de 2019, Carstens expresó su temor de que las criptomonedas privadas pudieran desintervenir a los bancos centrales en la arquitectura financiera mundial.
Carstens agregó que no veía el camino a seguir para el dominio global de las criptomonedas, y agregó que las monedas virtuales aún no han logrado ningún progreso significativo en términos de ser utilizadas como dinero.
El ejecutivo del BIS también se refirió a las stablecoins, afirmando que los tokens vinculados a moneda fiat podrían tener casos de adopción limitados y descartando cualquier amenaza general a las monedas fiat soberanas respaldadas por el banco central.
A pesar de descartar las stablecoins, Carstens destacó los problemas regulatorios asociados con proyectos como Diem, y dijo que dichos tokens requerirán leyes especializadas para garantizar que sean “aptos para su propósito”.
El gerente general del BPI ha pedido previamente a los bancos centrales que estén a la cabeza de la evolución del dinero digital.
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